lunes, 18 de julio de 2011

DOS CALLOS MALAYOS (MALASIA)

    Sí, ya lo sabemos. Llevamos el blog algo atrasado. Así que aprovechando un largo viaje que estamos recorriendo y ya os contaremos en el siguiente post, vamos poniendo al día nuestro paso por Malasia.
    Para llegar a Malasia, cruzamos la frontera por tierra dejando atrás Tailandia. Nuestro punto de partida malayo, fue, Pulao Penang. Se encuentra en la costa oeste de Malasia peninsular.
    Penang es una isla conectada por carretera a la península. A pesar de no ser muy grande, la sesanción que provoca es de gran ciudad. Según habíamos leído y más tarde comprobamos, Penang es una ciudad famosa por su gran variedad gastronómica. Y ésto se debe la diversidad cultural de sus habitantes.
    Decidimos alojarnos en el barrio chino. Es lo más barato que puedes encontrar en la ciudad y está lleno de "restaurantes" y puestecitos callejeros. No queríamos pasar allí mucho tiempo, ya que teníamos comprados los billetes para Indonesia y sólo disponiamos de poco más de 20 días para disfrutar de Malasia. Así que a la mañana siguiente nos dirigimos hacia la estación de buses para comprar los billetes hacia la costa este. Cómo no, en la estación los billetes costaban un 30%  menos, y como andamos bajos de presupuesto, nos salió redondo.
    Hasta que cogimos el bus, pasamos otro día más en Penang, deleitándonos de la variedad gastronómica en los barrios Little India y China Town. Fue todo un flashback volver a probar la comida India y saborear de nuevo nuestro añorado Chai.
Puesta de sol, Penang

Tai Chi

Templo hindú

Templo chino
     El viajecito de costa a costa hacia Kuala Besut, empezo a las nueve de la noche en un super autobús que, como no, nos dejó en una gasolinera de carretera, a las tres de la mañana, donde casualmente, había un taxi que, como no, nos llevo hasta una agencia, eso sí, cobrandonos el triple por la carrera. Despertamos al señor de la agencia, ya que serían las 4 de la mañana y nos dejó un cómodo banco de madera para que pasáramos las otras 4 horas que faltaban hasta la salida del barco. Bueno, a nosotros y al nido de mosquitos que tenía en la agencia.
    La llegada a una as Islas Perenthian fue impresionante. Desde Ko Tao no habíamos pisado una playa así. Elegimos Coral Bay como nuestro centro de operaciones. El mar en ésta parte, parecía una piscina y el agua era  transparente, así que, qué más podíamos pedir. Lagartos de más de dos metros? Pues sí, nada más bajar del barco, nos cruzamos con una lagartija que parecía el Lagarto Juancho, sólo le faltaba hablar.

Nuestro chiringuito

Coral Bay

Lagarto Juancho

Papá Juancho!
      Los días pasaban muy pero que muuuuuuyyyyy tranquilos, es decir: dormir - desayuno de 2 horas - playa - comer - snorkeling - siesta - cena - dormir. Así sucesivanente!!! Un día como buenos guiris, contratamos una excursión para pasar el día haciendo snorckeling. Pues bien, fue impresionante; y a diferencia de las otras excursiones, ésta sí mereció la pena, a pesar de que al principio no prometía nada. Al llegar a la hora acordada, vimos que no éramos los únicos en la excursión, había otra 30 personas esperando también!!!! llenamos 3 barcos, donde sóo nosotros y una pareja de chinos eramos guiris. El resto del grupo era una pandilla de adolescentes malayos bastante graciosos. Pero ésto hizo que la excursión fuera más divertida. 
Todos iban con salvavidas
 
   El primer destino fue un jardín de coral. Incluso nos cruzamos con un par de mantas. Estábamos alucinando con la cantidad de coral y los miles de peces que nos rodeaban.
    Después el barco nos llevo a buscar las famosas tortugas verdes, había que buscar las corrientes marinas para dar con ellas y aunque nos costó encontrarlas, dimos con ellas. Son gigantes y estaban pastando en el fondo. Cuando encontramos la primera, Parrita todo ansioso por tocarla la asustó y no veas como corren. Así que otra vez al barco y a buscar otra. Encontramos la segunda y pudimos disfrutar nadando a su lado.

  El tercer destino y el más esperado era el Shark Point. Es decir tiburonacos. Nos metimos al agua con algo de miedito y al cabo de un rato, ahí llegaban. Tres pedazo de tiburones nadando debajo de nosotros. No lo podíamos creer. Aparecían y desaparecían de la nada. Al parecer son bastante tímiidos y no dejan que te acerques. Pero la madre de los tburones estaba por llegar. Un peazo tiburon de dos metros y pico, y gordo como Falete. En fin, esperamos poder repetir algo así en Indonesia o cualquier otro sitio.



Son gigantes!!!

Ali

Parra
Tiburonaco!

  Despues visitamos otro jardín de coral y una playita solitaria, llamada Romantic Beach. Vaya mariconada. Aquí nos volvimos a cruzar con un par de tiburones. 
Peces Payaso

Peces Payaso y el payaso de Parra

Encontrando a  Nemo

Parrali!
    Otro día, alquilamos una piragüa. De nuevo entraron en escena dos pardos muy pardos, porque eso no había quién lo condujese. Después de una hora más o menosy tras unos cuantos "eres tonto o qué te pasa", conseguimos ponernos deacuerdo y remar a la vez y para el mismo sitio. Lo pasamos muy bien y tras 3 horas remando y aguantando un sol de escandalo, decidimos volver a casita.
A medio camino, encontramos esta playa


Parrita echando la siesta en una plataforma dentro del mar. Si es que!!!!
 
    Cuando nos dimos cuenta que o nos movíamos o nos íbamos a quedar de por vida, tras una semana, era hora de cambiar de destino. ¿Pero dónde?. Miramos la guía y en la ruta guiri, indicaba Cameron Highland. Pero claro... temporada alta, todos los buses full. Tras una hora en la estación de autobuses y sufriendo las risas y mofas de las taquilleras (aún no sabemos el chiste), compramos los únicos billetes que quedaban. Para ir, ¿dónde?. Daba igual. Cualquier sitio entre donde estábamos y Kuala Lumpur. Este destino fue Cherating.



     Llegamos de noche y lloviendo. Despues de ver varios sitios, nos quedamos en una cabañita a un minuto de la playa. Nuestra idea era pasar aquí uno o dos días para continuar hacia Singapur y desde allí ir a Kuala Lumpur. Pero como no, volvimos a estancar otra semanita. La razón, era un pueblito muy tranquilo, casi sin turismo y lleno de vida local. Y Ali aprovecho ésto para hacer un curso de Batik. 
Batik terminado!
Te Tarik para llevar

Flor típica del Sureste Asiático

Cabañita en Cherating

Otra de las razones por las que estábamos tan agusto y nos hizo cambiar de planes, fue conocer a Mar y Montse.Son dos hermanas gemelas de burgos, llevan cinco años viajando sin parar y la verdad nos encontrabamos muy agusto con ellas y escuchando sus aventuras.  Además, eran un par de cahondas y macarrilas. Llevaban un mes en Cherating debido a Carlitos. Un gatito que se encontraron muy malito y estaban cuidando hasta que se recuperase. Empezamos a compartir comidas, cafés, cenas y alguna que otra birra. Nos declaramos sus admiradores incondicionales y esperamos volver a verlas.

Montse, Carlitos, Ali y Mar
   
  

    Ahora sí, rumbo Kuala Lumpur. Para no perder la costumbre, 8 horas de autobús con el aire acondicionado a full.
    Teníamos 5 días por delante y muchas cosas por hacer. Tramitar visado de Indonesia por dos meses y si quedaba algo de tiempo también tramitar el de Vietnam.
    En total, pasamos 5 días en la capital malaya. Donde pudimos obtener los visados, hacer turisteo y quitarnos peso de las mochilas mandando otra cajita para España de 15 kilates!!!
    La verdad es que no tuvimos mucho tiempo para visitar la ciudad, aunque poco importa, ya que tenemos que pasar aquí algún día más, a la vuelta de Indonesia.




"Restaurante"

Edificio

Kuala Lumpur Tower... El pirulí de toa la vida

Monorail

Vistas, torres Petrona al fondo

Centro Kuala Lumpur
    Si algo nos parece que debemos destacar de este país es su riqueza cultural. Aquí conviven millones de personas con diferentes tipos de cultura y sus correspondientes religiones. Y, a nadie le cabe la idea de imponer una cultura por encima de cualquier otra, simplemente se respetan y conviven aprendiendo unos de otros.
    Haciendo autocrítica, pensamos que nuestra sociedad tiene mucho que aprender de algunos países a los que consideramos "menos desarrollados".
  Después de haberos dado un poco la chapa, nos despedimos con un fuerte abrazo y esperamos escribir antes el próximo post desde Bali, ¿Vali?.
    Un beso a todos. Los Parrali.

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